Libros y catálogos
Muchas empresas y e-commerces trabajan con toda una gama de productos y/o servicios que componen la oferta que ofrecen a sus clientes; es natural pensar que la presentación de estos productos y su disposición ante potenciales compradores resulta algo esencial para el transcurso efectivo de la actividad comercial. Dependiendo del tipo de negocio, el formato escogido para presentar dicha información varía; sin embargo, lo que no lo hace es la necesidad de cuidar este formato, así como su personalización y presentación de lo ofrecido en él.
Por esta razón, es muy importante que, a la hora de imprimir libros y catálogos, contemos con una empresa profesional y especializada en esta labor, para que nuestras expectativas a la hora de plasmar la oferta no se vean disminuidas por un producto insatisfactorio. Y es que son muchas las empresas para las que el componente editorial resulta esencial para mostrar su gama de productos: desde un muestrario de artículos de decoración e interiorismo como pueden ser telas y pantones como una revista en la que se muestren las novedades de la marca de cara a la próxima temporada. Las posibilidades son infinitas, y es por esa razón que las alternativas para personalizar estos libros y catálogos también deben ser lo suficientemente extensas.
Tipos de formatos
Como hemos mencionado, los muestrarios más comunes son libros, catálogos y revistas, aunque dentro de estos formatos encontramos muchos aspectos personalizables. La medida y el tipo de DIN-A utilizado es uno de los primeros pasos a decidir: según el número de páginas que tengamos previstas, la medida de hoja será más manejable en unos estándares u otros.
Materiales
Otro de los aspectos a decidir será el tipo de papel que querremos para nuestra publicación; tanto a la hora de escoger el tipo de cubierta (estucados brillos y mates de diferentes grosores) o el interior (papel offset, mate o reciclado) será uno de los aspectos clave a la hora de sentar la base del aspecto que tendrá el producto una vez finalizado. Las diferentes tintas (aplicadas al dorso, cubierta e interior) también sirven para personalizar el producto, así como si requerimos un plastificado para la cubierta y el encolado para la publicación.
Finalidad
A la hora de escoger el formato de la publicación es muy importante tener en cuenta la finalidad a la que irá destinado. Los catálogos, por ejemplo, son muy útiles para disponer de ellos en el mismo punto de venta, de forma que los clientes o los mismos trabajadores puedan consultarlos para proporcionar información sobre el stock disponible. Un tamaño estándar es perfecto a efectos de manejabilidad y de presupuesto, aunque dependiendo del tipo de producto/servicio podemos optar por una medida mayor. Normalmente se utilizan tanto como catálogos internos como de producto, así como revistas de noticias y magazines.
Por su parte, los libros suelen emplearse más como manuales, sobre todo si su grosor previsto es de dimensiones considerables. Sin embargo, a efectos de facilidad de manejo, también pueden servir como revistas de noticias o magazines; finalmente, las revistas irán destinadas tanto a algunos de los objetivos citados anteriormente como para finalidades más concretas (y reducidas) como tarifas de precios o revistas corporativas no muy extensas.